Es una infección parasitaria, producida por un protozoo del género Plasmodium. Se transmite al hombre por la picadura de un mosquito anófeles previamente infectado. La mayoría de las infecciones se deben a 4 especies Plasmodiales: P. vivax, P. malariae, P. ovale y P. falciparum. De éstas, en Benin predomina el P. falciparum multirresistente, y que además es el responsable de casi la totalidad de los casos graves de malaria.
Se caracteriza por fiebre, escalofríos, cefalea, nauseas, vómitos, astenia, malestar general, mialgias, sudores, y en el caso de la malaria grave se puede asociar a todo lo anterior: deterioro del nivel de consciencia hasta el coma, convulsiones, distres respiratorio, shock, ictericia, hemorragias e insuficiencia renal.
En Benin representa la primera causa de consulta, de hospitalización y la primera causa de muerte en < 5 años.
El Diagnóstico de ésta enfermedad se puede hacer de dos formas: 1. El frotis y la gota gruesa permiten comprobar la presencia del parásito en la sangre, cuantificar la parasitemia y seguir su evolución y 2. Test rápido (TDR): detecta el antígeno del parásito y sólo da un resultado cualitativo (positivo o negativo). En Benin se dispone de ambos métodos diagnósticos. Como ejemplo, en la foto de abajo, se puede ver una boleta con el resultado de una gota gruesa realizada en el dispensario de Ketou, y se ve en rojo una parasitemia de: 58630 parasitos/ml de sangre en una niña de 16 meses.
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